(de izq a der Carmen Aristegui, Lydia Cacho y Sanjuana Martínez en el Encuentro Internacional de Periodistas en Guadalajara, foto por José María Martínez Burgos)
Tres renombradas periodistas mexicanas creen que la concentración de poder de los grandes medios de comunicación y la falta de autocrítica tienen malas consecuencias para los mexicanos.
Aristegui señaló que las dos grandes redes protegidas por la Ley Televisa monopolizan el 90 por ciento de la audiencia y el mismo porcentaje de la publicidad del medio.
Según informó La Jornada de Jalisco:
La conductora de CNN en español aseguró que la “autocensura domina al periodismo mexicano. Es un fenómeno generalizado que se da por diferentes razones. Puede haber autocensura a partir de la conveniencia del periodista, a partir de no querer confrontarse con los poderes establecidos, con el dueño del medio, con los intereses del medio en el que trabaja, con sus propios intereses, con una amplia gama de posibilidades que no justifican pero explican parte de la autocensura que existe hoy en nuestro país.
“Nos ocurrió con el famoso debate de la Ley Televisa, que tenía su gracia hablar de la misma en W Radio en ese momento dado que Televisa es dueña de la mitad de ese medio, la otra mitad es del grupo Prisa.
“Esos dos grandes gigantes de la comunicación en nuestro caso en particular decidieron concluir de la mejor manera que encontraron el espacio construido durante cinco años por un grupo profesionales y periodistas. Estamos a un año de distancia de que Prisa y Televisa decidieron cancelar el espacio en donde colaboraba Sanjuana Martínez, Lorenzo Meyer, entre otros.
“La autocensura es un proceso de “entendimiento” de lo que no se puede abordar. Dentro de las coberturas que se hicieron en W Radio estuvo el caso de la Ley Televisa. En México hablar de los medios en los medios es un tabú.
“Y eso va en detrimento de los ciudadanos. ¿A quién se deben los medios sino a sus audiencias? Tiene o no derecho a saber qué era la Ley Televisa. En ese caso, cuando el tema es de enorme trascendencia pública que afecta a los concesionarios o a los que detentan el manejo de los medios de comunicación, lo fácil era hacerse güey, no hablar del asunto”.
Aristegui hizo su comentario en la mesa “Transformando la sociedad a través del periodismo”, que tuvo lugar el domingo en el cuarto Encuentro Internacional de Periodistas dentro el marco de la Feria Internacional del Libro.
Informador en su reportaje citó a Lydia Cacho, quién aseguró que “nosotros no somos víctimas profesionales, estamos aquí para hacer nuestro trabajo”. La autora de Con mi hija no, indicó que “la ética no debe someterse al poder, ni a la amistad, ni a los maltratos del amor”.
Por su parte Martínez manifestó que la censura y autocensura en las redacciones es una cuestión cotidiana, pero de la única manera que se entiende el periodismo es en su incomodidad.
“Los periodistas deben hacer las preguntas que la opinión pública quiere conocer, pues los que traicionan su compromiso con la sociedad civil, les están escamoteando su derecho a estar informados. El periodismo debe responder a la independencia, al compromiso social y a la crítica, de lo contrario se convierte en mera propaganda”.
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